Con motivo de la presentación del cuento para personas adultas Hoja el pasado 4 de octubre, de María Carmen Sanz, publicamos una entrevista a la autora en el diario AraInfo. A continuación reproducimos la entrevista completa:

Este viernes presentas tu cuento en Adebán, pero parece que no va a ser la presentación de un libro al uso, ¿qué vamos a encontrarnos?

Todas las presentaciones que hago son diferentes, adaptadas a las personas asistentes, me gusta jugar con la creatividad. En Adebán, vamos a hacer unas dinámicas creativas, vamos a invitar a entrar en la estación del otoño, a ser conscientes a nivel de vida en lo que las personas estamos sumergidas. Haremos unas dinámicas del aquí y ahora, de todo lo que implica la estación a nivel simbólico. No voy a contar el cuento sino que la gente va a contar el cuento, a través de las imágenes que la ilustradora hizo. Lo que pretendo es que las personas participen, el cuento de Hoja es para que la gente se lo cuente a si mismo/a.

¿Cuál es la aventura de la Hoja protagonista de tu cuento?, ¿qué puede enseñarnos?

Hoja enseña muchas cosas. Primero, desde el punto de vista de la sensibilidad. Me considero una persona altamente sensible y a veces a nivel social parece que si eres sensible no eres valiente. Hoja invita a ser consciente de que se puede ser sensible y al mismo tiempo valiente. Nos invita también a mirarnos internamente, en el sentido de plantearte ¿qué es lo que quieres hacer? y ¿hacia dónde quieres ir? Invita a comprender que en realidad todas las emociones son necesarias para la vida y debemos aprender a caminar con ellas. Invita a mirar siempre en positivo, pensar que siempre hay un rayito de esperanza, que siempre te vas a encontrar a alguien que te sonría. Invita a muchas cosas, al empoderamiento, a aceptarse, la autoestima, siempre desde esa mirada de que se puede.

¿Cuál fue el proceso de creación del libro?

Empecé en el 2016 con el taller “Danzando cuentos, contando danzas”, en la Escuela de Danza Integral, para el que necesitábamos hacer un cuento para lograr la acreditación.

Yo en aquel momento me estaba divorciando después de 14 años de matrimonio.

A mí la naturaleza me ayuda mucho a crear y todos los días iba a un parque del canal y me sentaba al lado de un árbol, un día empecé a llorar y a sacar la tristeza, y vi una hoja en el suelo que me llevó a crear el cuento que necesitaba hacer para el curso. De esta parte apasionante de mi vida -los payasos y las payasas de profesión a las cosas difíciles las llamamos apasionantes- me salió este cuento mágico. Lo llevaba en la cabeza, lo contaba en los talleres, veía que gustaba, que enganchaba, quería hacer algo con él y que llegara el mensaje a todo el mundo. A través de un compañero que había publicado una novela me puse en contacto con su editora, le mandé el cuento y le pareció tan bonito que empezamos con el movimiento para publicarlo.

Sacamos un crowdfunding  en abril de 2019 logrando 97 mecenas. Ha sido mucho trabajo, ha sido un proceso muy bonito, en el que hay que agradecer a muchas personas y en el que se ha puesto mucho amor. Mi trabajo siempre es desde el amor.

Cartel de la presentación de este viernes.

Cuando hablamos de cuentos solemos pensar en la infancia, ¿por qué necesitamos cuentos los adultos?

Yo creo que las personas adultas necesitamos cuentos para sanar.

Hoja se dirige a personas adultas porque quiero invitar a  parar y reflexionar.

Los niños y niñas no necesitan hacerlo, lo comprenden muy fácilmente, lo tienen muy claro. Cuando leen el cuento lo comprenden, si han sufrido algún tipo de bullying en el colegio se sienten muy identificados e identificadas con Hoja, entienden a la perfección sus emociones. Tienen una inocencia que ojalá dejásemos más tiempo en los más mayores. Creo que a veces tenemos que aprender a parar, disfrutar del momento presente. Pienso que es la persona adulta la que necesitamos poner conciencia en todo lo que estamos viviendo.

El libro es además inclusivo, con un audiolibro y un vídeo del relato en lengua de signos. ¿Por qué era importante lograr publicar estos formatos? 

Me emociona esta pregunta porque, sí, he tenido la fortuna de trabajar siempre con personas excluidas de la sociedad. El tema de la diversidad funcional me parece muy enriquecedor. Quería que el cuento pudiera llegar a todo el mundo, si hay quien no lo puede oír o ver, quería que llegara de otra forma. La ONCE ya ha pasado el cuento a braille, y esta semana se ha leído en el club braille, un honor para mí. Cuando hacemos algo creo que debemos pensar en todo el mundo, si trabajas desde el amor hay que tener presente a todas las personas. No hacerlo para mí habría significado tener un libro incompleto.

Dentro de la Economía Social y Solidaria, has participado en el programa Juntas Emprendemos. ¿Cómo definirías tu experiencia en él?

Destacaría el haber conocido a mujeres tan maravillosas como las que llegué a conocer, el grupo que hemos creado, en el que estamos todas muy pendientes del éxito de cada una de nosotras.

Me quedo con el haber aprendido cosas diferentes que nunca me había cuestionado y el caminar hacia el tema del emprendimiento.

Aprendimos a saber cómo ser autónoma, identificar cuál es mi proyecto, cómo lo quiero desarrollar y vender. Fue como las carreras de relevo, ir aprendiendo, llegar hasta un punto acompañada y saber seguir también sola.

¿Cómo se conjugan tus valores y tu forma de trabajar con la Economía Social y Solidaria?

Mi forma de trabajar es desde el amor, me gusta que la persona sea partícipe también de lo que yo hago y participar con otras. Por ejemplo, en Hoja ha sido muy importante la ilustradora, Isabel, para ello hace falta un don, una sensibilidad, yo le iba contando lo que quería transmitir a nivel de emoción y ella lo ha plasmado, lo ha “clavado”.

Es impresionante que nos podamos encontrar con gente tan fantástica en el camino de la Vida y que entre todas y todos nos podamos aportar.

Si todas las personas nos pudiéramos unir y ayudarnos las unas a las otras, todo iría mejor, puede sonar utópico, pero en la práctica nos pasa, cuando yo necesito algo lo busco y encuentro a la gente concreta.

Pienso que somos capaces de volver a conectar con esa magia de que entre todos y todas podemos hacer algo grande.